Cuando estas en busca de una pareja, vos siempre vas a tener esa duda de que si eres compatible con la otra persona. Acá veremos algunos de los criterios e indicadores a tomar en cuenta para valorar esa compatibilidad.
Para ser compatible con una persona hace falta tener mucho en común
Se dice que los polos opuestos se atraen, y más que posible sea cierto, pero atracción y compatibilidad son dos cosas muy distintas. Es necesario un poco de atracción para que se forme una pareja, en cambio tener varias cosas en común es un presagio para el éxito de la pareja a largo plazo.
Muchos estudios muestran que las parejas que son más felices incluyen a personas de un mismo origen socio económico y geográfico, y también con un nivel de educación similar. Suelen tener la misma edad o el hombre generalmente un par de años mayor (en parejas heterosexuales). Compartiendo también el mismo nivel de libido. Inclusive hay una correlación en la altura, teniendo en cuanta las diferencias entre los hombres y mujeres.
Esto no quiere decir que tener diferencias sea un problema grave. Pero, cuantas más diferencias haya, más son los riesgos de conflictos, que a su vez pueden desgastar la relación a largo plazo.
Algunas diferencias son positivas, y otras se pueden gestionar
No todas las diferencias son obstáculos inseparables, sino que también algunas suelen ser positivas. Por ejemplo, una persona que es hiperactiva y que se estresa mucho, puede llevarse bien con una persona más tranquila y zen. Cada uno puede influir de manera positiva en el otro, para ser más relajados o más activos. También puede ocurrir entre una persona muy emocional y otra muy racional. Cada uno puede aprender a desarrollar nuevos aspectos en su personalidad.
Igualmente, todo depende de cómo se plantee, los casos que se citaron pueden también generar grandes conflictos si las personas no están dispuestas a cambiar y aprender. Y ahí es donde está la clave, las diferencias se pueden gestionar si hay comunicación y voluntad de adaptarse por los dos lados.
Identifica si eres compatible con esa persona variando el contexto de vuestras experiencias en común
Si te interesa demasiado conocer la personalidad de tu pareja, tienes que compartir momentos con ella en contextos distintos. Por eso lo mejor sería tener experiencias indiferentes. Implica varias las opciones de ocio, porque no es lo mismo compartir una cena romántica que hacer un escape room juntos.
Se dice que la prueba del algodón es viajar juntos durante unas semanas. Los viajes permiten conocer mucho a la otra persona. Se pueden ver factores como la organización, la reacción frente al imprevisto, la relación con el dinero, las costumbres de comida y sueño, las prioridades, y muchas más.
Aunque también es interesante ver como la otra persona se comporta en un contexto con su familia, también con sus amigos y hasta en el trabajo.
Aunque la mayoría de las veces inconscientemente o no, se intenta mostrar la mejor faceta de uno a la persona que nos gusta. Es sencillo presentarse de una forma favorable durante quedadas cortas como una cena, pero toda una vida de pareja influye más que eso, y por eso es tan importante variar los contextos.
¿Ambos quieren una relación a largo plazo?
Suponemos que ya hablaron del futuro de la relación, y que los dos declararon querer una relación a largo plazo. Pero hay una diferencia muy grande entre pensar que quieres una relación a largo plazo y realmente quererlo.
Varias personas están enamoradas del amor, es decir, que cuando se acaba el enamoramiento piensan que ya no tiene futuro la relación. Esas personas suelen tener mayormente relaciones de corta duración por ese motivo.
Si enserio quieren una relación a largo plazo, esto significa que aceptas que el amor evolucione. En una pareja que es estable, los momentos de pasión e intensidad no desaparecen, pero son menos frecuentes. La relación se basa en intimidad, complicidad, dialogo, confianza, ayuda mutua, y muchas cosas más que también son importantes.
Si hablas con la persona que te gusta, deberías poder detectar si de verdad quiere una relación a largo plazo o no. Su pueden usar patrones como hablando de parejas anteriores y de la visión del amor en general.
¿Eres compatible con las obligaciones familiares o profesionales de la otra persona?
Hoy en día, muchas parejas se separan y mayormente se conoce a alguien que ya tiene hijos de una relación previa. Si cualquiera de los dos no tiene, tendrá que respetar la prioridad que representan para su pareja. Si los dos tienen, se tendrá que entender lo que implica al nivel logístico y de relación.
También, el trabajo puede ser una faceta muy importante para una persona, y esto puede que afecte la relación. Por ejemplo, si uno de los dos llega tarde y cansada a casa, la calidad del tiempo compartido se resiente mucho. Si desde el principio se sabe que el trabajo es prioridad para esa persona, después hay que asumirlo.
Ser compatible con una persona implica dialogar sobre lo importante
La comunicación es muy importante para la pareja, especialmente desde el principio. Hablar sobre lo que uno considera importante desde el principio y ver si hay compatibilidad sobre valores y objetivos principales.
Si son de países distintos ¿Dónde van a vivir a largo plazo? Esto hay que dejar en claro así no hay malentendidos y problemas a futuro. Si tienen creencias distintas ¿Qué se va a enseñar a los futuros hijos? Y ya que se habla de hijos ¿los dos quieren? ¿o algunos no?
¿Cuál es su visión sobre el dinero? ¿Sobre el reparto de tareas en la pareja? ¿Sobre el contacto con sus respectivas familias? ¿Y el trabajo? ¿Y las vacaciones? Se puede seguir con una lista muy larga, pero creo que se entiende. Esto se trata de hablar de lo que es importante para la pareja. A veces, significara que tengas que reflexionar, porque puede que no sepas cuán importante es alguna cosa para vos.
Y tampoco se trata de que ya tengas claro todo desde el principio. Por ejemplo, puede que no tengas claro si tener hijos. Pero es fundamental que la otra persona sea tu postura. Si vos quieres tener hijos, pero tu pareja no lo sabe todavía, entonces tienes que aceptar que capaz tu pareja no los vaya a querer, o si no es un riesgo que quieras aceptar, no debes seguir con esa persona. Eso depende de la prioridad que tenga una cosa para ti, puedes asumir cierta incertidumbre, o no.
Lo que no puede permitirte es no hablar de temas importantes, y mientras pasa el tiempo que te des cuenta de que tu pareja discrepa contigo sobre algo fundamental.
¿Ambos quieren un amor maduro?
El amor maduro es aquel el cual las dos personas crecen mutuamente, se quieren por lo que son y se ayudan uno al otro. En esa pareja se encuentra la confianza, admiración, complicidad, intimidad, y dialogo.
El amor inmaduro es aquel que quieres a la persona no por lo que es, sino por la idea que tienes del amor. Cuando intentas llenar un vacío y darle un subidón a tu autoestima. Cuando uno de los dos recibe más de lo que da en la relación. O cuando una persona está enamorada del amor.
Esas relaciones inmaduras, a veces pueden durar porque se convierten en relaciones toxicas, pero no son nada deseables. Por eso es fundamental saber si los dos tienen un planteamiento maduro de su relación.
No existe la pareja ideal
A veces, esa obsesión que tenemos de encontrar a una persona que sea compatible con nosotros puede matar cualquier relación a largo plazo con tu pareja. No tienes que conformarte, pero tampoco tienes que buscar una pareja ideal. Si existe una atracción, tienen mucho en común, pudiste descubrir a la otra persona en contextos distintos y vez que hay mucha compatibilidad, ¿Por qué no intentar?