¿Cómo te hablas internamente? Se dice que tener un dialogo interno en segunda o tercera persona te ayudara a regular la carga emocional, reducir la ansiedad y ver la realidad con mayor perspectiva.
Unas de las frases más comunes son “si lo intento voy a fracasar de nevo”, “a quien le voy a gustar con ese aspecto”. Las personas tienen la mala costumbre de hablarse como si fueran unos extraños, los cuales detestamos. Este es uno de los causantes malestares psicológicos.
La mayoría de las veces somos la voz cruel de nuestra autoconciencia, en vez, de dar herramienta y valías, devalúa y castiga.
Afirmaciones como “no vago para nada” edifican de a poco el universo a una depresión. Esta voz interna es imposible pausarla, pero, existen varias estrategias para mejorarla. La distancia psicológica es una de las maneras que nos ayudan a bajar el volumen de esa severidad tan desgastante.
El famoso dialogo interno distanciado, es una de las mejores estrategias las cuales favorecen el autocontrol e incentiva el bienestar.
Diálogo interno distanciado: qué es y cómo aplicarlo
El lenguaje que usamos para autodirigirnos, se determina la autoimagen. Por otro lado, no podemos dejar de lado la influencia que tiene nuestro entorno. Ya que este puede configurar la voz al dialogo interno.
Uno de los problemas con esa charla es que no se refleja en una realidad autentica, sino, que formamos una película mental que nunca son ciertas. Y estos razonamientos, son lo que llevan a aumentar la ansiedad y el malestar.
Esto se puede cambiar y es gracias a el dialogo interno distanciado, es decir, cuando lo apliquemos vamos a lograr desarrollar un pensamiento más racional.
La distancia psicológica te permitirá tratarte mucho mejor
Se describió la idoneidad de aplicar este dialogo para abordar las experiencias negativas diarias. Pues, imagínate una persona que la rechazaron de un puesto de trabajo, lo más posible que su charla va a ser de indefensión y bloqueo.
Por su cabeza puede pasar ideas como “nadie me va a dar otra oportunidad” o “no volveré a trabajar”. Ahora bien, si le facilitáramos herramientas para tener una charla interna distanciada, la percepción puede cambiar.
Si la persona logra una voz más caracterizada a la separación psicológica, su punto de vista seria otro. Es decir, sería una más amplia y menos focalizada en lo que es el fracaso y la negatividad.
Es decir, lo que este dialogo interno distanciado nos permite hacer es una reflexión más sana sobre eso que nos estresa y separado de lo emocional.